La mente es un mecanismo automático, que siempre está en movimiento. Suele ir tan rápido, que normalmente sentimos que somos nuestra mente, cuando en realidad es una parte más de nuestro cuerpo.
La parte más básica de nuestra mente se nutre de todo lo que perciben nuestros sentidos y reacciona en base a identificaciones inconscientes que tenemos, generando emociones, proyecciones y apegos que podemos sentir como verdaderos.
Para entenderla mejor, es importante saber que tenemos tres mentes. La mente negativa, que nos protege de cualquier peligro potencial, la mente positiva que se enfoca en el placer y la construcción, y la mente neutral que evalúa sin apego la realidad y observa la interacción entre las dos primeras mentes, para tomar decisiones desde la iluminación.
La meditación es una gran herramienta para equilibrar las tres mentes, y así vivir desde la esencia de nuestra alma y no desde la sombra de nuestras proyecciones.
