Sí. Fue en un concurso literario entre amigos que Mary Shelley inició la historia de Frankeinstein: una criatura abandonada por su propio creador, a quien el rechazo terminó definiéndole una identidad terrorífica.
Pero, ¿quién fue Mary Shelley?
Una joven que encontró su voz al escribir esta historia, sin experiencia previa, pero sí en una etapa muy difícil de su vida.
Hija de Mary Wollstonecraft, quien unos años antes publicó su obra <<Vindicación de los derechos de la mujer>>, en la que exige a los hombres tratar como seres racionales a las mujeres.
Shelley, tuvo que publicar las primeras copias de su obra en anonimato, pues en su tiempo, las obras escritas por mujeres no tenían gran acogida.
¿Qué hubo detrás de esta historia de terror?
En la época de la Revolución Industrial se realizaron experimentos sobre como devolver la vida a materia muerta a través de impulsos eléctricos. Lo que definitivamente influyó en la creación del personaje principal de la historia.
Sin embargo, son muchas situaciones de la época que inspiraron también la trama de la misma: el miedo a la curiosidad científica ilimitada, la creación de vida sin importar la felicidad de la misma, el anhelo de la autora por revivir a su hija fallecida; el temor de las mujeres al embarazo, por los grandes riesgos que representaba a su salud y la del feto.
Y por qué no, también una dura crítica a la situación de la mujer, quien continuaba siendo “distinta” al hombre: sin ciudadanía, libertad, derechos ni identidad. Una monstruosidad, que, con el tiempo, también empezaría a revelarse a un sistema que la abandonó, y de quién empezaría a exigir el reconocimiento de sus propias necesidades.
Definitivamente, Frankeinstein, es una obra que ha trascendido en el tiempo, y con muchas interpretaciones interesantes a considerar aún en nuestra época.
